viernes, 23 de junio de 2017

CHICHARRAS


Las chapas revientan bajo el sol.
Mi abuela barre el patio,

hojas etéreas y tierra;
después seca la transpiración de su frente
como diciendo: 

"siempre hay un nuevo día".

Las chicharras cantan al atardecer,
abajo
diminutos cuerpos
niegan a descomponerse,
como si una pequeña eternidad los abrazara
y no los dejara caer.
“No es abajo donde las cosas desaparecen,
si no arriba, a la altura de los pensamientos”

Mientras tanto 

en el pueblo
los reptiles bregan en las calles.
Otra época gris y fuego
para bailar curtidos 

en ese sacro campo de fuerza  

que algunos llaman fe

otros poesía


otros inutilidad.